Buenas noches, señorita. Mire usted que hace frío, y es una calle insegura para estar sola.
¿Podría decirme usted qué espera para irse a la cama, a dormir?
Con todo respeto… son ya más de las tres de la mañana, y yo la observo cada crepúsculo, siempre en su mismo balcón. Y digo, no es por curioso pero (hmmm, hmmm...) bueno sí, si es por pura curiosidad. Es que usted trae siempre esos ojos oscuros y tristes, y después pienso que se pasa las noches en vela, sola, abrazándose a si misma.
¿Qué es lo que aguarda, qué es lo que está esperando?
Sí… vaya. En realidad no sé que estoy esperando. O tal vez sí lo sé y no quisiera saberlo.
Pero ya que es usted una persona de confianza, le voy a confesar.
Como todas las noches, espero reencontrarme con el amor de mi vida. Ese que tiempo atrás me abandonó como a un perro mugriento.
Espero sentir. Espero enamorarme una vez más de él. Espero esa llamada que me distraiga como cada madrugada.
Espero un beso helado. Espero que aparezca bajo el marco de la puerta. Espero mirar por la ventana y que su figura aparezca y atraviese mis ojos.
Espero caer en sus brazos y despertar atada a ellos. Espero que llegue y me cante una canción con las manos en la acústica ¿me está entendiendo? eso es lo que estoy esperando. Por eso no duermo, y por tanto, no sueño. Me lo tengo prohibido, está vetado, restringido...
Y ya que usted es una persona de aún más confianza, ayúdeme a cerrar los ojos que me sangran de tanto llorar, esperar, no dormir y no soñar.
Sólo dígame, para al fin abandonar mi balcón, quién es él a quien no debo esperar…
Con todo respeto… son ya más de las tres de la mañana, y yo la observo cada crepúsculo, siempre en su mismo balcón. Y digo, no es por curioso pero (hmmm, hmmm...) bueno sí, si es por pura curiosidad. Es que usted trae siempre esos ojos oscuros y tristes, y después pienso que se pasa las noches en vela, sola, abrazándose a si misma.
¿Qué es lo que aguarda, qué es lo que está esperando?
Sí… vaya. En realidad no sé que estoy esperando. O tal vez sí lo sé y no quisiera saberlo.
Pero ya que es usted una persona de confianza, le voy a confesar.
Como todas las noches, espero reencontrarme con el amor de mi vida. Ese que tiempo atrás me abandonó como a un perro mugriento.
Espero sentir. Espero enamorarme una vez más de él. Espero esa llamada que me distraiga como cada madrugada.
Espero un beso helado. Espero que aparezca bajo el marco de la puerta. Espero mirar por la ventana y que su figura aparezca y atraviese mis ojos.
Espero caer en sus brazos y despertar atada a ellos. Espero que llegue y me cante una canción con las manos en la acústica ¿me está entendiendo? eso es lo que estoy esperando. Por eso no duermo, y por tanto, no sueño. Me lo tengo prohibido, está vetado, restringido...
Y ya que usted es una persona de aún más confianza, ayúdeme a cerrar los ojos que me sangran de tanto llorar, esperar, no dormir y no soñar.
Sólo dígame, para al fin abandonar mi balcón, quién es él a quien no debo esperar…